Mediación Familiar: habilidades del mediador en casos de divorcio
El análisis de las estrategias que pone en práctica el mediador familiar en sus intervenciones de mediación en los procesos de divorcio es el objetivo de estudio.
El mediador es el tercero imparcial, que facilita la comunicación entre los mediados, por voluntad de ellos, para que se tomen los mejores acuerdos y se logre conservar las funciones parentales.
La construcción de las habilidades del mediador requiere formación académica, experiencia de acompañamiento en procesos de mediación y el espacio de reflexión acerca de cada uno de éstos, misma que día a día se torna necesaria y consciente, inmersa en la cultura de la paz, para que, de manera pacífica y tolerante, se solucionen los problemas que nos atañen como integrantes de la sociedad.
Se muestra cuáles son las habilidades del mediador familiar que más favorecen en la tarea de efectuar una mediación exitosa. La tarea del mediador es hacer que los involucrados afronten de la mejor manera los problemas familiares que se presentan durante el divorcio y aún después de éste.
El alto índice de divorcios, mayor que el de matrimonios, es un fenómeno que se observa en la actualidad. El problema no es en sí el divorcio, sino lo que acontece alrededor de éste y que se constituye en el argumento y no en el hecho, para que se incrementen los conflictos.
Una mediación exitosa involucra a toda la familia, como núcleo sistémico que es, con el fin de que el daño psicológico y emocional afecte lo menos posible a sus integrantes.