Iscariotes
(Somos todos)
La novela se desarrolla en el México de 1967. La creciente cerrazón del régimen encuentra respuesta en una radicalización gradual pero inexorable de los movimientos sociales y políticos en todo el país. La experiencia en la Puebla de esos años es el eje de la historia, en la que el personaje principal transita de la inocencia a la esperanza y de este punto a un final insospechado.