No supe dónde quedó
Aquí hay puros cuentos desde el espacio abandonado en la esquina vacía. Vicios sofocantes en el polvo sin maquillaje. Del micro al macro, del yo al nadie, del aquí al ¿cuándo? Con o sin cubrebocas, las miradas filtran la parte más apestosa de su historia reprimida. Lo importante es relativo si escuchas al sujeto equivocado, al asesino, al ladrón, al menor, al perturbado, a quien no cuenta entre las sombras de la cobardía, bajo las faldas de una mesa, mientras esperas a que suceda algo. El sexo puede esperar, los motivos no, sobretodo cuando existen espacios en blanco de por medio.