Tejesombras
Huérfanos del errante
Hedera no es una asesina.
Una ladrona, sí. Una tejedora maldita por los dioses y una decepción para su familia, también. Sin embargo, alguien ha asesinado al Theokratés de Lydos, la ciudad de las maravillas y de los ingenios, que casualmente también es el padre de Tulio, el que fue su prometido.
Y todos los dedos la señalan a ella.
La única salida que le queda es aceptar la ayuda de la tripulación del Buen Padre, el viejo barco-teatro amarrado en el barrio del Errante, sin saber que la compañía de artistas y saltimbanquis que la ha acogido esconde un propósito que busca cambiar el orden impuesto por los dioses.
Un amor truncado.
Un romance prohibido.
Un Don capaz de crear vida.